EDUCACIÓN
MUSICAL
La música tiene una notable capacidad para afectar y manipular lo que sentimos. Simplemente escuchando las canciones que nos gustan se estimula el sistema de recompensas del cerebro, creando la sensación de placer y comodidad. Pero la música va más allá de nuestros corazones, hasta nuestras mentes, dando forma a nuestra manera de pensar. La evidencia científica sugiere que incluso pocos años de formación musical a temprana edad pueden dar forma a cómo el cerebro se desarrolla, mejorando la capacidad de diferenciar los sonidos y el habla. Esta modalidad incluye contenido como dictado rítmico, lectura rítmica, coreografía, entre otros.
Se trata de una disciplina entro de la malla curricular del Ballet Clásico (si se realiza vía el Ministerio de Educación).